Las semanas pasadas hemos hablado de lo que es un arrecife y lo importante que es para nuestro medio ambiente, en esta entrada hablaremos de las amenazas que afrontan los arrecifes corales en el mundo
Hace pocos días se revelo que el 35% de la gran barrera de coral ha muerto, por el cambio climático algo lamentable La Gran Barrera de Coral australiana está en peligro de desaparecer. Este paraíso natural -que tienen 2.300 km. de longitud y puede ser distinguido desde el espacio- está sufriendo un blanqueo masivo, el tono que adquiere cuando está muriendo, a causa del calentamiento global. Tras meses de investigaciones aéreas y subacuáticas, un grupo de investigadores descubrió que una tercera parte del coral de las zonas norte y central están muertos o falleciendo. En algunas partes de la barrera ya se ha perdido casi la mitad de los corales. Los puntos más críticos se encuentran frente a las costas de Townsville y Papúa, Nueva Guinea.
El profesor Terry Hughes, experto de arrecifes de coral de la Universidad James Cook de Townsville, en el Estado australiano de Queensland, advirtió que el calentamiento global está devastando uno de los lugares más emblemáticos de su país. «Descubrimos que, en promedio, 35% de los corales están muertos o en proceso de descomposición en 84 arrecifes que estudiamos en las zonas norte y centro de la Gran Barrera», alertó en un comunicado firmado por tres grandes universidades que participaron de la investigación.
Este es uno de lo mayores ecosistemas del mundo y los estamos matando.
Los arrecifes son afectados por la acción de la naturaleza como corrientes , huracanas y tormentas Sin embargo, el uso indiscriminado de sus recursos, la pesca con dinamita, la pesca de arrastre, el remolque de anclas, la recolección de corales para el comercio, los dragados en zonas cercanas o en el mismo arrecife, los derrames de petróleo, la contaminación orgánica ocasionada por el tratamiento incorrecto de las aguas servidas y las labores de construcción y deforestación en las costas cercanas, producen sedimentos que enturbian las aguas en los arrecifes y en algunos casos matan los pólipos de los corales. A esta labor de destrucción se suman las consecuencias del buceo irresponsable realizado sin guía cuando se aletea muy cerca del fondo o se manipulan continuamente los corales. Así mismo, la práctica de deportes náuticos, como el esquí acuático y las motos marinas, son una amenaza por las altas velocidades que generan. Se estima que de 5 a 10 por ciento de los arrecifes del Caribe han desaparecido como consecuencia de la acción humana. El mayor grado de deterioro de los arrecifes a nivel mundial se registró en la década de los 80. Un coral afectado puede tomarse más de 25 años en recuperarse y eso en caso de que lo logre.
El crecimiento rápido de las algas en el arrecife pueden matar a los corales ya que compiten entre sí por luz y espacio. Pero los corales han evolucionado por millones de años y se han adaptado para defenderse de las causas naturales. La alta fecundidad, la producción de nematocistos, extender sus pólipos solo de noche son solo una muestra de estas adaptaciones. Hasta el momento han sido muy exitosos.
Desafortunadamente hay otras amenazas para las cuales no se han adaptado. Los efectos antropogénicos tales como la contaminación, deforestación, extracción indiscriminada y la sobrepesca son algunos de los factores que podrían desestabilizar el ecosistema. La contaminación puede afectar de varias formas a los corales.
Cualquier substancia que afecte la claridad del agua como el exceso de sedimentación causada por los dragados de las costas, la erosión ocasionada por la deforestación, afectará a las zooxantelas y su habilidad de fotosintetizar. Las aguas usadas y fertilizantes aumentan la cantidad de materia orgánica y por tanto causan eutrificación en el agua. Esto estimula el crecimiento de las algas que al crecer más rápido que los corales asfixian los pólipos y compiten por espacio en el suelo marino con los corales. Los contaminantes por agentes químicos o biológicos pueden ser tóxicos y matan los corales. La descarga de aguas calientes de plantas generatrices de energía es tan letal como cualquier veneno ya que los corales están adaptados a las temperaturas estables del trópico. Los pescadores, buzos y visitantes pueden afectar de varias maneras al arrecife, ejemplo de esto puede ser, daños causados por las anclas de sus embarcaciones, tirando basura o alterando el equilibrio de las comunidades al pescar demasiados peces y poner en peligro la capacidad reproductiva de las poblaciones. Algunas evidencias que nos muestran que los arrecifes pueden estar en peligro están siendo reportadas en los últimos años.
El blanqueamiento de corales se ha descritos en muchas áreas tropicales incluyendo el Caribe. El blanqueamiento es provocado por la expulsión de las zooxantelas y se le ha atribuido a pequeños aumentos en la temperatura. Se ha asociado esto a la mortalidad de muchas colonias de corales que en ocasiones parecen recuperarse naturalmente. La enfermedad de banda negra ha sido descrita como tejido necrótico que crece en los corales y parece ser causada por la cianobacteria Phormidium corallyticum.
Los arrecifes con mayor riesgo de una grave degradación en el futuro están en el este de África; en el sur, sudeste y este de Asia; y en todo el Caribe.